Para el cumpleaños de mi hermana se me ocurrió prepararle un tarta que mas que una tarta...
...¡es una golosina!
La verdad es que el sabor de las piruletas es un sabor muy particular, que me encanta.
No todas las piruletas son iguales, yo me refiero a las piruletas de corazón con ese sabor a cereza tan intenso, que hace que cuando probamos cualquier golosina o caramelo con ese sabor digamos:
¡Sabe a piruleta!
Pues así es nuestra tarta de hoy, sabe sin lugar a dudas a piruletas, pero no deja de ser un sabor suave y con el punto exacto de dulce!
Es la tarta perfecta para los más golosos o para los peques.
Ingredientes:
- 6 hojas de gelatina neutra
- 1 yogur griego
- La medida del yogur de azúcar
- 5 piruletas y otras 8 o 10 para decorar (preferiblemente Fiesta)
- 50 ml de agua
- 50 ml de licor de piruletas ( o bien la mezcla que os explico más adelante)
- 350 gr de nata para montar
- Sobaos o galletas trituradas para la base
Preparación:
1º En primer lugar en un molde desmontable, prepararemos la base de la tarta, yo he utilizado los sobaos, porque era lo más fácil y rápido pero también podemos hacerla de otra manera. Por ejemplo, con una mezcla de galletas trituradas, mantequilla y leche, poniendo la galletas trituradas en el molde y añadiendo un chorro de mantequilla y un chorro de leche, vamos aplastando con una cuchara hasta dejarlo liso y reservamos en la nevera.
O bien, podemos cortar unos sobaos por la mitad e ir colocándolos en el molde adaptándolos a la forma del mismo.
Otra opción también es hacer un bizcocho fino.
2º Con la base lista pondremos a hidratar nuestras láminas de gelatina en un poco de agua y trituraremos las 5 piruletas. A continuación, ponemos a calentar los 50 ml de agua en un cazo y añadimos los trozos de piruletas, a medida que removemos, hasta que se disuelvan por completo.
3º Cuando las piruletas se hayan disuelto añadimos las láminas de gelatina que teníamos hidratando y removemos bien hasta que se disuelvan por completo y dejamos templar. Es muy importante que la gelatina se disuelva bien, ya que si no es así, corremos el riesgo de, cuando probemos nuestra tarta, encontrarnos trozos duros de gelatina.
4º En otro recipiente mezclamos, con la batidora, el azúcar con el yogur griego y el licor de piruleta*.
* El licor de piruleta es bastante difícil de conseguir, de hecho creo que lo venden en Carrefour y pocos sitios más. A mi, como no lo conseguí, se me ocurrió hacer una mezcla que se estila mucho y que tiene ese sabor a piruleta que estamos buscando, nosotros en las Islas le llamamos chupito de Kojak (por los chupachups) Para hacer nuestro chupito de Kojak nos hace falta Amaretto o Disaronno, granadina y lima. Las proporciones serían algo así como: 2 dedos de Disaronno por 1 dedo de granadina y un chorrito de lima.
5º Una vez hayamos mezclado bien añadimos la mezcla de gelatina y piruletas que habíamos reservado.
6º Por otra parte, batimos la nata y cuando esté montada le añadimos poco a poco la mezcla anteriror.
7º Por último vertemos la mezcla sobre la base de la tarta y metemos en la nevera durante unas 5-6 horas.
8º Para desmoldar pasaremos un cuchillito o similar por el borde del molde para separar bien la tarta.
9º Una vez tengamos lista nuestra tarta podemos decorarla como más nos guste. Yo he puesto alrededor de la tarta las piruletas de decoración y las he fijado con unas cintas.
Y ya tenemos lista nuestra tarta de piruleta!
Espero que os haya gustado, y si es así, ya sabeis...¡a compartirla!
Besitos!! =D
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